El Síndrome de Procusto y la política retributiva en las cooperativas
No existe, a priori, ningún modelo ideal. El mejor sistema de valoración del trabajo es el que la asamblea decide tras u
FEVECTA. Federación Valenciana de Empresas Cooperativas de Trabajo Asociado
Publicado el lunes, 27 de noviembre de 2017 a las 10:49
Las cooperativas son organizaciones democráticas e igualitarias, regidas por el principio de "1 persona = 1 voto", lo que refleja la importancia de cada persona, y no del capital aportado, en la toda de decisiones. Eso está muy bien y así debe ser.... en el plano societario.
Pero, ¿qué pasa en el plano laboral? Pues, es verdad que las cooperativas son organizaciones más horizontales que otro tipo de empresas de caplital y eso también se traslada a los abanicos salariales... El problema viene cuando el principio de igualdad se traslada al sistema retributivo de manera general y directa sin distinguir por puestos de trabajo. De acuerdo con el principio "a igual trabajo, igual remuneración", debe remunerarse igual a quienes aportan lo mismo desde su puesto de trabajo, pero hacerlo si existen diferencias bien en función de la jornada bien por niveles de responsabilidad diferentes, etc. puede generar problemas serios, porque acabará por desmotivar al personal y suscitar conflictos difíciles de resolver.
Pero entonces, ¿qué sistema retributivo es mejor? ¿qué principios deben inspirar la política retributiva de nuestra cooperativa? ¿cuándo hay que tratar a todas las personas socias por igual y en qué casos no? ¿puede ayudar hacer una valoración de puestos de trabajo?
En este post , abordamos estas cuestiones y ofrecemos algunas propuestas.